Usuarios del centro de salud de Otero mostraron sus quejas por no disponer de ascensor durante los últimos tres días, por una avería. Varios pacientes, en su mayoría con problemas de movilidad, presentaron quejas formales por tener que "hacer malabarismos" para poder acceder a las diferentes consultas a través de las escaleras. Personal del equipamiento reconoce los problemas, pero asegura que ayer mismo quedaron subsanados.

"Tuve que fastidiarme y subir las escaleras con ciática", declaró Mari Vázquez, una de los muchos pacientes afectados por el fallo mecánico. "Médicos y voluntarios tuvieron que ayudar a personas en silla de ruedas y mayores a llegar a sus citas", relata la misma mujer, que asegura haber hecho cola tras otros ciudadanos para formalizar su queja a Sanidad.

La presión de los usuarios hizo efecto, puesto que a lo largo de la mañana de ayer la empresa encargada del mantenimiento de los ascensores de este tipo de locales sanitarios consiguió solucionar el problema. Según los propios trabajadores del consultorio, el problema se alargó debido a la necesidad de obtener por encargo una pieza que había resultado dañada.

Los pacientes lamentan no disponer de medios más eficaces para resolver este tipo de fallos. "La atención del centro de salud es buena, pero no podemos estar así casi una semana por un simple fallo mecánico", comentan los habituales del equipamiento sanitario, conscientes de que el principal problema es la estructura del mismo. "Debería de haber otras alternativas o pensar en habilitar un centro de salud sin barreras arquitectónicas", señala un empleado.