Decenas de pájaros hechos con gomaeva y mucho cariño revoloteaban ayer por la mañana en una sala polivalente del centro social de Campomanes. A veces, incluso, se escapaban a los pasillos sin causar destrozos. Los habían confeccionado los niños, de edades comprendidas entre los 6 y los 12 años, que disfrutan cada día de los talleres infantiles que durante todo el verano se extienden desde la apertura del equipamiento hasta la hora de comer.
"Hacemos muchos juegos con los niños. Por ejemplo, los de memoria con números, los de cartas y también tenemos en la sala el billar para nosotros", relata Aida López, una de las dinamizadoras del centro.
Eso sí, los niños lo tienen claro. Si hay que escoger, de todas las actividades que tienen prefieren las manualidades. Y cada periodo festivo tiene un tema. "Recorriendo Asturias" es el escogido para el verano, aprovechando la fauna y los paisajes asturianos para los talleres diarios.
Estos talleres, según Verónica Álvarez, también dinamizadora del centro, se realizan para "conciliar la vida laboral y familiar de los que viven en la zona". Además de las semanas festivas como la Semana Santa y las Navidades, los más pequeños cuentan con cursos de cocina anuales.
Una de las jornadas más queridas por los niños es el día culinario, en el que las dinamizadoras hacen que las distintas nacionalidades, como Perú y Colombia, se vean reflejadas en los platos que cocinan. El pequeño Luis, por ejemplo, cuenta orgulloso que llevó arepas, uno de los platos típicos de Venezuela. Para terminar, los participantes juegan en los jardines del Campillín. "Vamos al aire libre a jugar al escondite o a la tirolina", cuenta Claudia, otra de las niñas habituales en estos talleres.
En general, el centro social de Campomanes cuenta con un amplio catálogo de cursos enfocados hacia la juventud, aunque cualquier edad es bienvenida en todos los talleres que se realizan. La cata de vinos se llenó y tuvo una larga lista de espera, al igual que talleres como los de cuero, pilates, costura y bailoterapia.
Los días señalados también son una excusa para el centro social, especialmente las iniciativas solidarias. Un 25-N dibujado con velas encendidas a la puerta del Ayuntamiento es una de las actividades realizadas por el centro para el Día Contra la Violencia Machista. Y el Carnaval es una alegría para todos.
