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FRANCISCO GARCÍA JURADO | Catedrático de Filología Latina de la Complutense, habla mañana en la Cátedra Alarcos

"El sistema educativo ha convertido las escuelas en guarderías, incluso la Universidad"

"Hemos convertido la Literatura y la Historia en bienes de consumo: los museos están llenos de turistas que no entienden nada"

Francisco García Jurado, en una imagen tomada la semana pasada en la Universidad Autónoma de México. LNE

El catedrático de Filología Latina de la Complutense Francisco García Jurado debuta mañana (20 horas) en la Cátedra Emilio Alarcos Llorach de la Universidad de Oviedo, Lo hará con la conferencia, "La cátedra del entusiasmo", en el Aula Magna del edificio histórico de la Universidad de Oviedo. La charla estará dedicada a Alfredo Adolfo Camus, el maestro de personalidades como Leopoldo Alas Clarín, Benito Pérez Galdós, Emilio Castelar y Marcelino Menéndez Pelayo. García Jurado, como Camus, habla y escribe sobre literatura antigua mostrando su conexión con el mundo contemporáneo.

-"La cátedra del entusiasmo" es un título curioso para una conferencia sobre un profesor de literatura clásica.

-Mi conferencia analiza a dos escritores, que son Galdós y Clarín, desde la perspectiva de su profesor de Literatura Latina. Clarín escribe la necrológica de Camus y habla en ella de su entusiasmo. Dio clases cuarenta años y por ellas pasaron Castelar, Canalejas, Menéndez Pelayo... una nómina interminable. Él los formó y cambió su manera de ver el mundo.

-¿Cómo lo encontró?, ¿cómo dio con Camus?

-Tengo la impresión de que fue el personaje el que me encontró a mí. Estaba estudiando la existencia de una academia latina, y entre sus últimos académicos figura el profesor Camus, empecé a indagar y? Galdós se refería a él al principio de "Fortunata y Jacinta", Clarín escribió su necrológica. Estoy dedicando mi vida a reconstruir otra vida, la suya.

-¿Qué es lo que le interesa tanto de él?

-Su riqueza vital. Nace en 1817 en París, es hijo de andaluza y francés, que llega con el ejército napoleónico y tiene que salir de España cuando pierden la guerra. Muere en 1899, en tiempos de la Restauración, y su vida recorre toda esa etapa de la historia de España. Camus tiene una ventaja sobre otros personajes relevantes de la época, y es que él es un personaje secundario. Eso le confiere más capacidad de analizar las cosas, detrás de todos los políticos y escritores que entran en contacto con él.

-¿Cuál era esa visión nueva de la literatura y el mundo clásico?

-La enseñaba comparándola con el mundo y la literatura moderna, entendiendo el mundo antiguo en comparación con la política moderna, con la escritura moderna? Estaba muy en el carro de lo que sería después el Instituto Libre de Enseñanza. Él creía que había que mirar el pasado para construir un presente mejor.

-¿Esa nueva visión le acarreó críticas?

-Tuvo problemas con los neocatólicos, un sector muy conservador del siglo XIX, que entendía que todos los males del mundo moderno eran remitibles al mundo antiguo, que la enseñanza clásica había provocado la Revolución francesa y a partir de ella llegó la secularización. Camus escribió una serie de trabajos riéndose de esta gente y levantó mucha polémica: la prensa del XIX está llena de ataques a Camus.

-La sociedad moderna también ha desplazado la literatura clásica del centro del conocimiento, por razones distintas.

-Muchos sectores van contra la enseñanza de los clásicos, pensando que ya no enseñan ni sirven para nada. Así que esa visión de santificar la ignorancia sigue estando vigente. Hace falta un nuevo Camus que rebata a los bárbaros. Lo peor es haber convertido la Literatura y la Historia en un bien de consumo. Los museos están llenos de turistas que no entienden nada, se vende mala literatura, la cultura se queda en una corteza sin fondo y sin contenido.

-¿No es más accesible la cultura ahora que nunca?

-Los medios de comunicación han contribuido a democratizar la cultura, pero el receptor no adquiere algo de calidad. Se requiere una educación de más altos vuelos, no solo orientada a la profesionalización. La ciencia está bien considerada y la mayoría no se plantea qué es la ciencia.

-¿El remedio?

-Pasa por la educación. Tenemos un sistema educativo que ha terminado convirtiendo las escuela en guarderías, incluso la Universidad.

-Se estrena en la Cátedra Alarcos.

-Su directora, Josefina Martínez, me escuchó en un congreso hace unos meses y tuvo el detalle de concederme este honor, de manera espontánea. Durante muchos años impartí Historia de la Lingüística, y si Camus ejerció el reinado académico en el XIX, lo que ostentó Emilio Alarcos fue el reinado académico en la lingüística funcional en el siglo XX.

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