El año que viene seguirá habiendo risas, juegos y magia para los niños ingresados en el Hospital Universitario Central de Asturias, el HUCA. De eso se encargarán los payasos de Clowntigo, una asociación formada por voluntarios que alegran la estancia de los chiquillos y sus familias, y las jornadas del personal que los atiende. Clowntigo presentó este fin de semana su calendario para el año que viene, del que ha editado mil ejemplares, que vende a diez euros cada uno y con los que recauda buena parte del dinero con el que costea su local y su actividad.
Cada mes del almanaque de 2019 está dedicado a un payaso de Clowntigo, salvo uno en el que coinciden dos. Son trece los voluntarios que visitan cada viernes las plantas de pediatría, oncología pediátrica, la UCI pediátrica y la sala de neonatos. Cada viernes, dos parejas, y se van rotando. Los niños con estancias más largas o con reingresos los conocen por el nombre y los esperan. Los payasos se hacen fotos con ellos y les dejan una tarjetita de recuerdo. Para ellos se forman y se entrenan con psicólogos, magos y payasos profesionales. Enrique Patricio, que interpreta a Tropezones y que lleva tres años en la asociación, pasó seis meses preparándose antes de visitar por primera vez a los niños en el HUCA.
En el calendario los payasos se fotografían dentro del Hospital, perfectamente caracterizados, mientras realizan sus números o hacen poses graciosas. Y con ellos aparecen médicos, enfermeros, auxiliares y personal de limpieza, todos los que trabajan para que los niños recuperen la salud. Lo hacen subidos a una camilla, corriendo por los pasillos en un triciclo o haciendo malabares. "El calendario refleja lo que hacemos", explica Enrique Patricio.
Cuenta que, pese a que han de enfrentarse a vivencias duras, hacer de payaso en el HUCA es un subidón. "Sales contento" y acaba por ser "una acción egoísta" pese a lo que piensa la gente, porque "das mucho más de lo que recibes".
Clowntigo participa desde hace un par de semanas con la Universidad de Oviedo en un estudio sobre la repercusión fisiológica del juego y la risa en los niños ingresados en el HUCA. Los jueves por la mañana una pareja de payasos actúa para los niños; antes de empezar la función y al acabar se registran las constantes vitales y se registran.
La asociación también ha grabado un audiovisual, en el que dos de sus payasos, Tropezones y Tiritina, ingresan en el HUCA. En el documental, que proyectan en los colegios, aparecen siendo operados en el quirófano, pasando por consulta, en las urgencias. Así Clowntigo contribuye a desdramatizar el paso por el hospital y ayuda a los niños a perder el miedo.
Clowntigo, que es una asociación de voluntariado y sin ningún ánimo de lucro, participa en eventos muy excepcionales como la carrera de la Asociación Española contra el Cáncer o la del HUCA.
Su calendario de 2019 puede adquirirse en el HUCA, en la peluquería que hay en la planta 0, y en diversos establecimientos de Oviedo, Colloto, Gijón y Mieres.
