En las décadas posteriores a la guerra civil, las orquestas, al margen de amenizar los bailes, constituían en sí mismas un espectáculo y en muchos casos el público asistía a sus actuaciones como si de un concierto musical se tratara. Asturias aportó grandes conjuntos orquestales con un protagonismo destacado de Trubia.
En el verano de 1967 la localidad albergaba cinco orquestas: "Marimbas Punto Azul", "Bohemia", "Hispania" ,"River" y "Siboney" y dos conjuntos modernos "Los J" y "Especiales". Sorprende que para sus fiestas patronales se contratara a una orquesta ajena a la localidad como era "La Estrada" de Salas. Esta orquesta actuó en las fiestas patronales de Trubia ininterrumpidamente desde 1951 a 1967. Conviene recordar que Trubia había aportado anteriormente otras dos orquestas destacadas en los años 40: La "Negresco", posiblemente con la "Gong" de Avilés la mejor de Asturias de la época y "Jazz Melodía".
Desconocemos la fecha exacta de la fundación de la orquesta Marimbas. Parece ser que fue recién finalizada la guerra civil, en 1940, como sustitución de otro grupo anterior "La Orquestina" con el nombre de "Punto Azul", bautizada así por uno de sus componentes que representaba una marca de radio con ese nombre. En 1949 en la publicidad de un baile, sigue figurando el mismo nombre y posteriormente a sugerencia de un conocido dueño de una sala de baile gijonesa, se le añadió "Marimbas". Más tarde con la incorporación al grupo de Abel, tomaría el nombre de "Abel y sus Marimbas". Una de las señas de identidad de la orquesta eran sus vocalistas Paco Longoria, Pepito Suárez y Cholo Boix.
A partir de 1955 el éxito de la "Marimbas" se dispara al convertirse en la orquesta titular de los "Jardines de la Herradura", en el campo de San Francisco de Oviedo, compartiendo escenario con grandes orquestas y figuras artísticas invitadas en las fiestas de San Mateo. Sus componentes eran Abel, Miaja, Alzueta, Evaristo, Granda, San Martín, Medaro, Torre y Gutiérrez. En su primera época eran todos trabajadores de la Fábrica Nacional de Trubia, cuya Banda de Música fue cantera inagotable de músicos. Un aspecto relevante de la "Marimbas" era el de contar con el beneplácito de la empresa para sus desplazamientos en nuestra región y fuera de ella, lo que en otras agrupaciones musicales se convertía en un calvario para conseguir la autorización de las empresas donde trabajaban. Recientemente un vocalista -Arboleya- de la recordada "Orquesta Mary" de Moreda, me confesaba que al solicitar un permiso para una actuación fuera de la localidad, un responsable de la empresa en la que trabajaba le dijo: "la empresa o la orquesta".
En los últimos años la orquesta ya había perdido la identidad trubieca y entre sus componentes había de otras localidades y funcionarios, mineros, empleados. Sin duda, el mayor obstáculo de aquellos años para los miembros de los grupos musicales, era compatibilizar trabajos con ensayos y actuaciones. Sólo una gran afición y sacrificio permitió la supervivencia en la posguerra, con unas comunicaciones casi inexistentes que dificultaban el transporte de los instrumentos musicales.
La "Marimbas" permanece inalterable en la memoria de varias generaciones de ovetenses en el maravilloso marco de "La Herradura" en el campo San Francisco. Tomaría su relevo otro grupo musical emblemático la "Gran Kapitol", compuesto por residentes en Oviedo y en gran parte también por oriundos de Trubia, localidad que podemos bautizar como la "Liria asturiana" (en alusión a la localidad valenciana famosa por su tradición musical).
Sin duda, Trubia ha sido la gran protagonista de la música orquestal asturiana en la segunda mitad del pasado siglo.
