Un total de quince viajeros resultaron ayer heridos leves después de que su autobús urbano tuviese que dar un frenazo a escasos metros de la parada situada en la calle Melquiades Cabal, en la zona del Milán. El incidente tuvo lugar a las tres y media de la tarde y obligó a realizar un gran despliegue sanitario para trasladar a usuarios y la propia conductora del vehículo con pequeños golpes, arañazos y distintas magulladuras.

La piloto del autobús, un vehículo articulado de 18 metros de largo, sufrió lesiones en el cuello y una pierna y poco después de ser atendida explicó a LA NUEVA ESPAÑA su versión sobre lo sucedido. "Un coche cruzó desde el carril izquierdo para entrar en un garaje sin señalizar la maniobra y tuve que frenar para evitar la colisión", explicó la conductora.

El resto de heridos fueron trasladados por ambulancias y también tuvo que intervenir una UVI Móvil posteriormente para tratar a una viajera que se había sentido indispuesta tras lo ocurrido. Tanto fuentes policiales como la propia empresa coincidieron en valorar todos los daños provocados por el incidente como "leves".

Los usuarios estaban utilizando la línea C1 que conecta Lugones con las facultades del Cristo y se vieron sorprendidos por un incidente que a pesar de lo aparatoso pudo haber sido peor en caso de colisión. "Los daños materiales se limitaron a un cristal roto del interior del vehículo", apuntó la conductora que confesó haber tomado una foto del conductor del vehículo al que acusa de cometer una infracción antes de ser trasladada por personal sanitario.

Segundo accidente

El de ayer se trata del segundo incidente de esta naturaleza en poco más de un año en la ciudad. En mayo de 2018 una decena de personas resultaron heridas leves después de que su autobús, también articulado, se viese obligado a realizar un frenazo por evitar una colisión en la plaza de la Cruz Roja. En aquella ocasión también hubo un importante despliegue.

Los datos

Frenazo. Quince personas resultaron ayer heridas leves a consecuencia de los golpes recibidos por el frenazo dado por el autobús urbano, según la conductora para evitar una colisión con un coche que se cruzó en la calle Melquiades Cabal para acceder a un garaje.

Magulladuras. Entre los heridos se encontraba la propia conductora, quién sufrió golpes en el cuello y una pierna. La mayoría de los heridos presentaban pequeños golpes, magulladuras y arañazos a consecuencia de los impactos.

Gran despliegue. Al haber muchos afectados fue preciso un importante despliegue sanitario para trasladar a las personas afectadas e incluso intervino una UVI móvil al encontrarse indispuesta una de las viajeras debido al susto sufrido.