Tres personas, dos hombres y una mujer, se enfrentan a tres años de cárcel cada uno por estafar presuntamente a quince personas de nacionalidad ecuatoriana ofertándoles un servicio inexistente de envío de paquetes a su país para apropiarse tanto de su dinero como de su mercancía. La Fiscalía calcula que los procesados, un ecuatoriano y dos españoles defraudaron en total unos 22.000 euros.

Según el informe del fiscal, los supuestos estafadores se valieron de un locutorio de Oviedo para captar a sus víctimas. La mujer, en calidad de comercial, convencía a los usuarios del locutorio para enviar sus paquetes a través de su empresa y el otro varón de nacionalidad española se encargaba de la labor de recogida de los paquetes para su supuesto envío a posteriori. Ambos actuaban en nombre del tercer acusado, un ecuatoriano de aparente solvencia para los clientes.

La acusación sostiene que los tres se repartían las ganancias tras hacerse con los paquetes y cobrar el servicio para, seguidamente, desaparecer sin dejar rastro alguno para que los estafados pudiesen ponerse en contacto con ellos para reclamarles el dinero.

Para el fiscal los hechos, que según fuentes cercanas al caso generó cierta conmoción entre la numerosa comunidad ecuatoriana existente en Asturias, suponen un delito continuado de estafa por el que pide una condena de tres años de cárcel para cada uno, inhabilitación para el sufragio pasivo durante el tiempo de la condena y una indemnización para compensar los daños ocasionados a sus víctimas.

Expulsión de España

En el caso del procesado de nacionalidad ecuatoriana, le ministerio fiscal pide que se sustituya esta condena por su expulsión de España durante seis años, siempre y cuando el fallo le condene a más de un año de prisión.

La vista del juicio está prevista para hoy a las 9.30 horas de la mañana en el juzgado de lo penal número 2 de Oviedo con la citación de varios testigos para tratar de aclarar los ilícitos denunciados.