Los cinco hombres acusados de traficar con varias drogas en Oviedo desde finales de 2017 reconocieron ayer los hechos, pero evitarán entrar en la cárcel. Los dos cabecillas, que aceptaron penas de cárcel de tres años, adujeron estar siendo sometidos a tratamientos de desintoxicación para conseguir la suspensión de las penas, mientras que los tres restantes tampoco tendrán que entrar en prisión al carecer de antecedentes y ser condenados cada uno a un año de reclusión.

La Fiscalía solicitaba penas de entre dos años y seis meses y cuatro años de cárcel para los procesados. Según las investigaciones, el grupo había distribuido por la ciudad hachís, marihuana y pastillas desde finales de 2017. El caso se destapó al descubrirse que uno de los acusados había recibido varios ingresos en su cuenta bancaria con conceptos como "regalo", "prueba" y "Navidad". Todo apuntaba a que podría tratarse de palabras en clave para ocultar pagos por la droga.

Las pesquisas pudieron averiguar que dichos pagos correspondían a las compras de droga que otro varón efectuaba al titular de la cuenta. Asimismo, se identificaron a otros tres individuos como clientes habituales de estos proveedores para la venta de los tres tipos de sustancias a particulares.

El Ministerio Fiscal pedía la pena más elevada de cuatro años de cárcel para el primer acusado, al que se le incautaron en su residencia ovetense 78,95 gramos de resina de cannabis, 18,71 gramos de cocaína, 12,39 gramos de MDMA y 380 gramos de cannabis. El valor de las sustancias interceptadas en la vivienda ascendía a 8.433 euros. Por su parte, el segundo acusado portaba en el momento de su detención seis trozos de hachís, mientras que en su domicilio en Oviedo se intervinieron 11,78 gramos de cannabis y 3,23 gramos de MDMA.

El primero aceptó, en la negociación previa que evitó el juicio, una pena de tres años y tres meses de cárcel, así como el pago de una multa de 5.700 euros. El segundo, defendido por el letrado Luis González, se conformó con tres años de prisión y el pago de una sanción de 190 euros. En ambos casos, las defensas alegaron que se trata de dos adictos a las drogas que se están sometiendo a tratamiento para dejar sus adicciones. La sala de la Audiencia Provincial aceptó suspender la ejecución de la pena a cambio de que ambos continúen con su desintoxicación.

El resto de procesados simplemente se marcharon satisfechos por haber sido condenados a solo un año de prisión. El hecho de carecer de antecedentes les permitirá evitar el ingreso en prisión como suele ocurrir en la mayoría de las penas inferiores a dos años cuando afectan a personas con un historial limpio. El caso fue resuelto en apenas unos minutos en la sala de vistas de la Sección Segunda de la Audiencia.