La Policía continúa buscando a los autores del robo que tuvo lugar en una cafetería de La Corredoria la madrugada del pasado domingo. Los delincuentes consiguieron llevarse la recaudación de una de las máquinas tragaperras del local, a pesar de que tuvieron poco tiempo para actuar, ya que varios vecinos de la zona los increparon desde las ventanas al despertarse con el ruido que provocaron los asaltantes al romper la luna del establecimiento. "Escuché un coche a toda velocidad y luego un golpe seco. Después me asomé y vi a uno de ellos romper la luna del establecimiento con la tapa de una alcantarilla. Más tarde salió más gente a las ventanas y empezamos a gritarles y a decir que habíamos avisado a la Policía, pero ellos siguieron sin inmutarse hasta que salieron con el dinero de la máquina", explica uno de los vecinos del entorno.

Los hechos ocurrieron alrededor de las cuatro y media de la madrugada del sábado al domingo. El negocio afectado se encuentra en la calle Cardenal Álvarez Martínez, en las inmediaciones del complejo deportivo Díaz Vega, una zona en la que hay otros establecimientos hosteleros y varios bloques de viviendas. "Eran tres personas. Uno estaba en el interior del vehículo y los otros dos se encargaron de entrar en la cafetería. Sabían de sobra lo que hacían y tenían calculados los tiempos porque no se pusieron nerviosos al oír los gritos de los vecinos", señala otro de los testigos.

Los vecinos de la zona consultados por este diario coinciden al señalar que los ladrones utilizaron un Seat León de color negro para llevar a cabo el asalto. Algunos incluso fueron capaces de coger la matrícula y facilitársela a los agentes que se personaron en el lugar de los hechos y que rápidamente se percataron de que el vehículo había sido robado previamente. Aunque fuentes oficiales de la Policía Nacional no lo confirman, el "modus operandi" utilizado por los ladrones apunta hacia la "banda del Seat", una organización de delincuentes que llevaba tiempo sin dejarse ver y que recientemente ha reaparecido con varios asaltos en diversos puntos de Asturias. El método es el mismo: el coche como elemento fundamental para sus golpes, centrados en cajas registradoras y tragaperras.

La Policía, que ya ha recuperado el coche robado, está a la espera de ver las cámaras de seguridad de la cafetería para avanzar en la investigación. "Hace ocho meses que nos entraron a robar. Hicieron lo mismo y se llevaron el dinero de las tragaperras. Nos dijeron que podían ser de esa banda, pero no lo aseguran. Esperemos que las cámaras sirvan para atraparlos", dice la propietaria de la cafetería.