La calle Álvarez Lorenzana se hunde y necesita una intervención de manera urgente. Al menos eso es lo que solicitan los vecinos del entorno de esta zona del Cristo, que le piden al Ayuntamiento “que tome cartas en el asunto” cuanto antes. “A pesar de ser una calle peatonal –cuenta con un carril de rodadura– hay tráfico en ambas direcciones y eso está acabando con el adoquinado. En teoría sólo pueden pasar los residentes y las personas que lo hacen por trabajo, pero hay tantos bajos, garajes y portales que resulta prácticamente imposible controlar”, denuncia Pilar Manzano, la presidenta de la asociación vecinal Monte-Cristo.

Manzano considera que no es suficiente con un “rebacheo”, asegura que la calle Álvarez Lorenzana, que es no es nada corta, necesita un cambio de pavimento. “Está todo el suelo hundido y cuando llueve un poco más de la cuenta se forman unos charcos que parecen auténticas piscinas”, dice Pilar Manzano. “Lo que hay que hacer es cambiar el adoquinado y asfaltarlo todo como si fuese una calle normal. Aunque sea una calle peatonal no tiene por qué tener adoquines. También es necesario controlar el tráfico, de eso no cabe ninguna duda”, añade la representante vecinal.

Una solución provisional para acabar con la gran densidad de tráfico antes de acometer las obras, según sostienen los vecinos, sería convertir la calle en una vía de una sola dirección. “Se puede dejar en dirección descendente hacia la zona de la plaza de la Paz”, dice Pilar Manzano. “Lo que está muy claro es que tienen que hacer algo cuanto antes porque llevamos mucho tiempo padeciendo este problema y ya empezamos a estar un poco hartos. Sabemos que Álvarez Lorenzana no es la única calle del Cristo que necesita un arreglo, pero también es evidente es que es la que más urge”, afirma la presidenta de la asociación de vecinos Monte-Cristo.

Acceso peligroso

Por otro lado, el colectivo al que representa Pilar Manzano le pide al Ayuntamiento que mejore el acceso que comunica la calle Baldomero Fernández con la calle Montecerrao y con un concurrido supermercado que utilizan a diario los residentes de la zona. Actualmente hay unas “empinadas escaleras” que no pueden ser utilizadas por las personas que tienen problemas de movilidad. Los vecinos de la zona aseguran que la solución más idónea sería instalar “unos tramos de rampas que no tengan demasiado desnivel” para mejorar un acceso que además consideran “peligroso”.

Además, la asociación Monte-Cristo también pide “algún tipo de solución” para salvar el “gran desnivel” que suponen las escaleras que comunican la calle Víctor Sáenz con la avenida de las Segadas. Se trata de un punto del barrio en el que ya se han registrado varias caídas y que, además, supone un auténtico reto para los vecinos que viven en la zona. El colectivo que preside Pilar Manzano también le propone al Ayuntamiento que coloque más bancos en la zona de Montecerrao. “Se trata de una zona de la ciudad por la que salen a pasear muchas personas de todas las edades y se necesitan”, dice Manzano.