Hay otros ‘sanmateos’, pero están en este. Lo dijo el cantante de la orquesta "París de Noia", Oliver Pérez, "vamos a convertir La Corredoria en una fiesta", y así fue, el barrio más poblado de Oviedo vivió su gran noche mateína con la formación gallega. A las nueve de la noche miles de personas se congregaban en la Plaza del Conceyín esperando el espectáculo. El desfile del día de América en Asturias había colapsado el tráfico en el centro de la ciudad así que la organización decidió retrasar el inicio del concierto quince minutos para que los vecinos de otras zonas de la ciudad pudiesen llegar. El tren bajaba repleto desde Llamaquique y Uría.
A las 21.16 horas una cuenta atrás coreada a voz en grito por los asistentes anunciaba sobre el telón negro que cubría el escenario que iba a arrancar el espectáculo. Y el espectáculo era eso, espectacular. Escenario gigantesco, pantallas por doquier y todo tipo de efectos. "Vamos a hacer ritmos muy modernos con algo de la vieja escuela", anunciaba el cantante. A partir de ahí en el escenario podía pasar cualquier cosas. Bailarines, acróbatas, cantantes, músicos, todo hasta sumar a 15 personas en algunos momentos de la actuación. Tipos colgados de poleas que volaban sobre sus compañeros, plataformas que subían y bajaban, llamaradas, confeti, serpentinas... y todo ello con una intensidad de últimos segundos de una final del Eurobasket. Unos segundos que fueron tres horas. Tres horas saltando, bailando y cantando ante un público entre el que había grupos de amigos de todas las edades, familias con niño, familias con perro, señoras con silla de la playa, parejas comiendo pipas y hasta un nutrido grupo de políticos locales. El alcalde, Alfredo Canteli, se acercó a La Corredoria con el núcleo duro de su equipo de gobierno. Allí estaban Nacho Cuesta, Covadonga Díaz, Mario Arias o Conchita Méndez.
En lo musical, un pupurri de grandes éxito de ayer y de hoy. Sonó el "Despechá", de Rosalía, "Slo Mo" de Chanel, con la que España triunfó en Eurovisión aún sin ganar. Y hubo más canciones eurovisivas, "Mamá" de Rigoberta Bandini o "Terra", de Tanxugeiras.
