"Brizzy", el perro guía de María Cristina Lucchese Seda, la joven ciega que recogió el premio de la Concordia junto a Miguel Carballeda, presidente de la ONCE, y la pequeña Liv Parlee Cantin, mantuvo un comportamiento ejemplar durante la ceremonia, pese a los temores iniciales. Obedeció las órdenes de Cristina Lucchese, la guió con gran efectividad y, mientras la ceremonia transcurría, se mantuvo acostado sobre la alfombra del escenario. Por algo dicen que es el mejor amigo del hombre.