"La sala Canellada es una feliz y magnífica realidad". Con estas palabras, el cronista oficial de Cabranes, Ángel Corripio, daba por concluida la inauguración del espacio que albergará la colección permanente de obras de José Canellada Llavona en el Museo de la Escuela Rural de Asturias en Viñón.

La muestra consta de 34 obras del artista nacido en Torazu, cedidas por la familia de Ángel Sanz Rodríguez, amigo del autor y coleccionista de su obra fallecido hace tres años. Los trabajos reflejan, con un estilo muy personal, la vida rural asturiana.

El acto de inauguración de la sala comenzó con el descubrimiento de una placa en la que el Ayuntamiento de Cabranes muestra su agradecimiento a Ángel Sanz Rodríguez por su interés por el arte asturiano y por exponer las obras del pintor cabranés. Asimismo, se hace constar la cesión que la familia del fallecido hace para que la colección permanente se haga realidad.

La viuda de Ángel Sanz, Ángela Ranz, y su hija, Covadonga Sanz, descubrieron la placa en presencia del alcalde, Gerardo Fabián, y la directora general de Patrimonio del Principado, Otilia Requejo.

Covadonga Sanz intervino para rememorar a su padre, gracias al cual la colección ha podido hacerse realidad. y para elogiar la obra del pintor

"Su pintura estuvo siempre muy presente en mi hogar, por lo que ahora me impresiona verlas expuestas donde, a mi entender, mejor pueden estar", dijo.

En la sala hay, además, un busto de Canellada realizado por José Cuadra. Su autor intervino para elogiar el arte de todas las obras. También el artista local Santos Monestina se deshizo en elogios hacia el pintor, y su sobrino, Rafael Canellada, destacó su singular faceta humana.