"Al pensar en Baldomero Pérez, la mayoría de mis compañeros del coro le compararía a 'Quini', por su calidad como futbolista y, también, como persona. Porque, si como director es de lo mejor, como persona es maravilloso". Así definía ayer José María Prieto, "Chemari", uno de los vocalistas del Coro Minero de Turón, la figura de Baldomero Pérez Méndez, que durante 22 años fue director de la formación. Un emblema de la música coral asturiana que ayer recibió un merecido homenaje en el marco del XXVII Concurso y muestra de folclore "Ciudad de Oviedo", que organizan el Ayuntamiento y LA NUEVA ESPAÑA.
Próximo a cumplir los 80 años, Baldomero Pérez Méndez se mostró emocionado al recibir el homenaje conjunto del Coro Minero, con todos sus intérpretes formando sobre el escenario tras una muestra que entusiasmó al público del teatro Filarmónica, y del propio concurso. Modesto y humilde, el veterano director destacó la importancia que tuvieron en su trayectoria figuras como Carlos Jeannot, y reivindicó la calidad de sus sucesores al frente de la formación, entre ellos el actual director, Ángel Albarracín: "El coro quedó en buenas manos, mejores que las mías", aseguró.
En la parte competitiva, la matinal demostró que la competencia será dura en las jornadas que quedan hasta el final de esta edición del certamen. Una presión para los participantes, pero un privilegio para el público, que repartió aplausos y ovaciones entre todos los participantes. En esta segunda jornada de la semifinal, actuaron la pareja de baile formada por Marina Caso del Torno y Santiago González Galguera; la pareja de gaita y tambor formada por Carlos Velasco y José Iván González; el gaitero solista Francisco Fernández; y los cantantes Andrea Alonso (tonada juvenil); Patricia Pariente y Maribel González (tonada femenina); y Rubén Barredo, Gerardo Menéndez, Eloy López y el multicampeón Celestino Rozada Tamés (tonada masculina), que puso el broche de oro a una emotiva e intensa jornada.
