Es tarea complicada elegir una comedia de Billy Wilder (los dramas los dejaremos para peor ocasión) para alegrar estos días porque casi todas son magistrales. Eliminemos las malas: Aquí un amigo y Bésame, tonto. Y del resto, pongamos en el pedestal que se merecen Con faldas y a lo loco, El apartamento, En bandeja de plata, Irma la dulce y Uno, dos, tres. Ojo: todas ellas (salvo Con faldas..., un desparrame integral) tienen brotes dramáticos y/o amargos que desdibujan a veces la sonrisa antes de recomponerla con finales rotundos.
03 Tómalo en serie