El Real Instituto de Estudios Asturianos (RIDEA), una institución dedicada a la investigación y a la difusión de la cultura asturiana en todas sus facetas, acaba de celebrar su 75.º aniversario. Por ese empeño por preservar el patrimonio cultural de la región, que se mantiene intacto, y por su compromiso con el futuro, buscando abrirse a la ciudadanía y atraer a los investigadores más jóvenes, LA NUEVA ESPAÑA ha querido distinguir al Real Instituto como “Asturiano del mes” de noviembre.
La denodada defensa del acervo cultural asturiano y el esfuerzo constante en favor de su divulgación han sido el emblema del Instituto desde su creación, en octubre de 1945. En esa fecha la Diputación Provincial de Oviedo acordó crear un Centro de Estudios Asturianos que un mes después, el 24 de noviembre, se incorporó al Centro Superior de Investigaciones Científicas. El 15 de noviembre, el rector de la Universidad de Oviedo, Sabino Álvarez Gendín, había sido nombrado director del ya denominado Instituto de Estudios Asturianos (IDEA). Ahí comenzó la andadura de la institución, que desde entonces no ha descuidado sus objetivos, manteniendo un programa estable de actividades, con más de un millar de conferencias desde su creación, y con varias publicaciones periódicas, que incluyen 76 números de su “Boletín de Humanidades y Ciencias Sociales” y 53 de su “Boletín de Ciencias”, además de 673 libros.
Su actual director, Ramón Rodríguez, tiene puesta la vista en el futuro y su objetivo es abrir la institución a la ciudadanía y captar el interés de los jóvenes investigadores. También ha incorporado nuevas publicaciones, como los “Cuadernos del RIDEA”, que ya van por su segundo número y que están dedicados a la cultura popular.
El primer antecedente del RIDEA hay que buscarlo en los años veinte del siglo XX, cuando el historiador Juan Uría creó un centro de estudios asturianos. Ese fue el germen del Centro de Estudios Asturianos, 20 años después, renombrado poco después como IDEA, Instituto de Estudios Asturianos, cuyo acto solemne de inauguración tuvo lugar en el palacio de la Diputación, la actual sede de la Junta General del Principado, el 4 de agosto de 1946.
El IDEA emprendió sus actividades públicas con dos actos: una Fiesta del Bable en Oviedo, en el Paraninfo de la Universidad, con discursos y lecturas de poemas en asturiano, y un homenaje a Gaspar Melchor de Jovellanos en su casa natal de Gijón.
El Instituto contó entre sus miembros, desde sus inicios, con grandes personalidades de la cultura asturiana, como el catedrático de Historia del Derecho Ignacio de la Concha, el escritor y periodista Constantino Cabal, el historiador medievalista Ramón Menéndez Pidal, el músico Ángel Muñiz Toca, el artista Nicanor Piñole o Ramón Prieto Bances, que fue ministro de la Segunda República. La dirección del IDEA la ocuparon, hasta 1978, los rectores de la Universidad de Oviedo. El último fue Teodoro Cuesta. A partir de entonces el puesto se cubre por votación. El primero en ser elegido para el cargo fue el jurista y periodista Jesús Evaristo Casariego. Le sucedieron el magistrado Francisco Tuero Bertrand, el abogado José Luis Pérez de Castro, el medievalista Juan Ignacio Ruiz de la Peña y Ramón Rodríguez, que ocupa el cargo en la actualidad y que durante las últimas décadas, hasta su reciente jubilación, ha estado al frente de la biblioteca de la Universidad de Oviedo.
La primera sede propia del Instituto fue la de la calle San Vicente, en Oviedo, donde hoy está el Museo Arqueológico, hasta 1950, cuando se trasladó a la calle Santa Susana. En 1953 se trasladó a la que, hasta hoy, ha sido su ubicación definitiva, en el palacio del Conde de Toreno, en la calle San Francisco.
La biblioteca y el archivo constituyen el capital más valioso del RIDEA. La institución custodia, entre otros fondos, los de la antigua Diputación Provincial, los de la Sociedad Económica de Amigos del País y de Minas de Figaredo, la biblioteca del rector de la Universidad de Oviedo Fermín Canella y la de Constantino Cabal y una ingente cantidad de documentos del religioso y poeta valdesano Padre Galo.
El Instituto de Estudios Asturianos, IDEA, no ostentó el título de “Real” hasta 1992. La Casa Real aceptó el nombramiento del Príncipe de Asturias, Felipe de Borbón, hoy en el trono de España, como presidente de honor de la institución y el 9 de octubre de 1991 se hizo oficial, con una visita del futuro monarca a la sede ovetense.
Al año siguiente el entonces rey, Juan Carlos I de Borbón, concedió el título de “Real” a la institución, que desde entonces se denomina Real Instituto de Estudios Asturianos, RIDEA.
