“A mí es que este paisano caeme muy bien”. Tomás García fue ayer el primero en Asturias en mostrar su apoyo a David Gallego. En el día más complicado para el entrenador del Sporting, en la terminal del Aeropuerto de Asturias esperaba, como tantas otras veces, este aficionado nacido en Bañugues y vecino de Castrillón. “Cabeza bien alta, que nadie cuestione tu trabajo”, le espetó al técnico al verle aparecer. “Tomás, ya sabes cómo es esto, hoy estás y mañana dejas de ser el entrenador”, contestó el catalán, cariñoso con el gesto del seguidor rojiblanco. “Me alegro un montón de que siga en el banquillo. A ver si contra el Huesca llega la reacción”, reflexiona Tomás tras enterarse por LA NUEVA ESPAÑA de que David Gallego dirigirá al equipo rojiblanco ante los oscenses. Con toda la afición defraudada por el resultado y la imagen dada en Las Palmas, y a pesar de que el Sporting pasa por horas bajas, inmerso de una racha con sólo dos puntos de los últimos 27 en juego, Tomás García y su mujer, Beni Rodríguez, no dudaron en desplazarse hasta el aeropuerto para recibir a la expedición rojiblanca. “Hay que estar más que nunca con ellos y no quedarse en casa. En mi zona hacía tiempo que no veía a gente del Oviedo, pero desde que están por encima de nosotros no paro de encontrármelos por la calle”, ironiza, guasón, Tomás.
Dice este contramaestre de la marina mercante, ya jubilado, que la delicada situación del equipo no ha cambiado a David Gallego. “Le vi como siempre, fuerte y con energía”, subraya tras estrechar la mano del de Suria y conversar con él brevemente. “Soy ‘galleguista’, aunque entiendo que con la racha tan mala que llevamos haya gente un poco cansada. Lo que no me explico es cómo ha podido pasar todo esto de golpe, porque los jugadores siguen siendo los mismos con los que éramos líderes en la jornada diez”, explica, con diplomacia, Tomás.
El viernes espera un partido desapacible. Al pobre momento futbolístico del Sporting hay que añadir que se anuncia lluvia y la hora no es la más atractiva: 21.00. Además, el encuentro será retransmitido en abierto por Gol Televisión. “Voy a estar allí, seguro. Nosotros no fallamos nunca”, adelanta Tomás, un habitual en la zona baja de la grada este de El Molinón, siempre con Beni a su lado. No fue Gallego el único en recibir el saludo cariñoso de este carismático seguidor del conjunto gijonés. Gaspar Campos o Borja López, entre otros, se pasaron a agradecerle el estar allí esperándoles tras el largo trayecto desde Las Palmas.
“Hay que reaccionar”, repite Tomás antes de contar las horas para volver a El Molinón para animar al Sporting. Y también a Gallego, porque el “galleguismo” ha pasado de ser legión, a quedarse bajo mínimos.
