La Guardia Civil detuvo ayer al responsable del bar de Benicarló (Castellón) en el que se sirvió por error detergente de lavavajillas en lugar de vino a un cliente que luego murió. El dueño prestó declaración ante los agentes y quedó en libertad con cargos, a la espera de que hoy pase a disposición judicial. El suceso tuvo lugar el domingo. El hombre, de 50 años, fue trasladado con pronóstico muy grave al Hospital Comarcal de Vinarós, donde falleció. Al parecer, alguien introdujo lavavajillas en una botella de vino que por error se metió en la cámara frigorífica, de donde se cogió la botella para servir la copa.