Un joven mató ayer a dos policías en el estado federado de Brandeburgo (este de Alemania) al atropellarlos con el coche en el que huía mientras le perseguían como principal sospechoso de la muerte violenta de su abuela. El joven, de 24 años y conocido por las fuerzas de seguridad por sus problemas con las drogas, fue detenido tras la colisión y trasladado a un hospital.