Hansjörg Rohrbach, el hombre de nacionalidad suiza que el sábado causó la muerte a un agente de la Policía Local de Carballo (La Coruña) al arrollarlo con su coche, se mostró ayer "arrepentido". Rohrbach ingresó en prisión tras decretar ayer la jueza prisión comunicada y sin fianza por homicidio involuntario, después de que el hombre declarase durante dos horas y media.