La Policía brasileña realizó ayer una gran operación para desarticular puntos de venta de droga en "Cracolandia", una zona de São Paulo que reúne el mayor número de usuarios de estupefacientes de la ciudad. Unos 500 agentes entraron en la "tierra del crac", donde conviven diariamente traficantes y adictos, en su mayoría al crac, y practicaron al menos 30 detenciones.