Un hombre de 66 años es el vigésimo segundo ciclista fallecido en accidente de tráfico este año. Murió ayer en torno a las ocho de la mañana en el municipio de Palomeque, en Toledo, a la altura del kilómetro dieciséis de la carretera CM-4004, entre las localidades toledanas de Palomeque y Valmojado, tras ser atropellado por un vehículo cuyo conductor se dio a la fuga. La gravedad del caso y la frecuencia que han adquirido estos siniestros llevó incluso al director general de Tráfico, Gregorio Serrano, a pedir colaboración a través de su cuenta de Twitter para localizar al fugado.

El presunto homicida, que ha sido identificado como un vecino de una zona próxima al lugar del atropello, tiene 28 años y huyó abandonando su coche a unos pocos metros del lugar del accidente, con el lado izquierdo de la zona delantera destrozado.

Los servicios sanitarios, que intentaron sin éxito reanimar a la víctima y la Guardia Civil, que mantenía ayer la búsqueda del conductor fugado.

La insólita frecuencia de las muertes de ciclistas en carretera, con 22 fallecidos este año, ha llevado el problema a la primera línea política. El PP ha presentado esta semana una propuesta de endurecimiento de las penas para los conductores que atropellen a ciclistas por imprudencia grave.