Los moteros están en el punto de mira de Tráfico. Se trata de una nueva campaña para prevenir la accidentalidad, que en Asturias se traduce en el doble de víctimas mortales en la última década. En más del 55 por ciento de los accidentes con fallecidos figura como causa principal el exceso de velocidad.

Según la Jefatura Provincial de Tráfico, fueron "especialmente preocupantes" los datos correspondientes a 2017, cuando sobre un total de veintisiete víctimas mortales diez eran usuarios de motocicleta (37,03 por ciento). En 2018, de un total de quince fallecidos en las carreteras asturianas tres eran usuarios de motocicletas, lo que representa el 20 por ciento de las víctimas mortales.

Los controles no se limitarán a las pruebas de consumo de alcohol y drogas y al exceso de velocidad, sino que serán integrales, tanto del vehículo como del conductor y también del pasajero. Así, los agentes de la Agrupación de Tráfico revisarán la documentación, el casco, los neumáticos, las placas de matrícula, el alumbrado y hasta la limitación de potencia. También se controlará si está en vigor la ITV.

La campaña se realizará a lo largo de todo el verano, periodo en el que aumenta el uso de las motos, y podrá abarcar fines de semana y festivos e incluso centrarse en aquellas horas en las que se prevé una mayor fluencia de motoristas. Asimismo, los controles se intensificarán en las carreteras convencionales, donde se producen la mayoría de los accidentes.