La región está amenazada por dos incendios de gran tamaño, uno situado en la sierra Bobia de Burgazal, en el límite de Tineo con Villayón, y un segundo que saltó desde El Bierzo leonés a Degaña. En el incendio de Tineo, que afecta a La Burgazal, El Tejedal, Rellanos y La Peral, se movilizaron Bomberos del SEPA con base en Tineo, Valdés y Cangas del Narcea, así como la brigada de refuerzo de Tineo, dos cooperativas forestales, varios helicópteros de extinción y el Kamov de Medio Ambiente con base en Ibias, sin olvidar a los agentes de Medio Natural. El fuego afectó sobre todo a monte bajo y llegó a estar demasiado cerca de alguna casa. Las llamas alcanzaron un gran frente debido al fuerte viento.

El otro incendio afectó a la localidad de Anllarinos, en el Bierzo, pero terminó entrando en Degaña por el valle de Piedrafita, aunque no se esperaba que se extendiese, al estar limitado por un nevero y pedreros. El fuego aún se mantenía a la caída de la noche.

En la región hubo más fuegos. Uno afectó a la sierra del Pedrorio, en Belmonte, cerca de El Capítulo y Fontoria. Otro a la sierra del Palo, en Allande, cerca de La Reigada. También hubo fuego en las brañas de Yernes y Tameza, cerca del área asolada hace unas semanas en la subida al collado de Fancuaya. En el Oriente hubo llamas en el Cerro Llagos, entre Cuerres y Beceña, en Cangas de Onís. En Llanes, entre Riensena y Llamicu, también cerca de Villahormes y en la sierra de Cueva Negra, cerca de Nueva. Y en Piloña, cerca de Melarde.