Nuevo incidente en la enfermería de la cárcel de Asturias. Un preso intentó quitarse anteayer, domingo, la vida cortándose el cuello con unas cuchillas de afeitar. Sucedió a las siete de la tarde. Las heridas que se autoinfligió eran de gravedad extrema, pero un médico y una enfermera, con ayuda de dos funcionarios, lograron taponar las heridas y evitar que se desangrase, hasta la llegada de los servicios médicos, que trasladaron al herido al HUCA de Oviedo. El incidente causó un gran revuelo, debido a la gran cantidad de sangre que perdió el recluso. Se trata de un preso joven, que no es la primera vez que intenta quitarse la vida, según indicaron funcionarios de la cárcel asturiana. El recluso se encuentra ingresado aún en el centro hospitalario, ya fuera de peligro, según indicaron fuentes de Instituciones Penitenciarias.

El incidente ilustra la situación de la enfermería de la cárcel asturiana, donde están ingresados presos como el exconsejero de Educación José Luis Iglesias Riopedre, condenado por el "caso Marea". Hace escasas fechas, otro preso acorraló a varios funcionarios tras destrozar una mesa y otro, que estaba vigilado además por un recluso "sombra", ante el riesgo de que se suicidase, se ahorcó colgándose de un cinturón que ató a una barra para hacer ejercicios en el patio, sin que se llegase a tiempo para salvarle la vida.

En la enfermería hay ahora mismo un total de 85 presos, en su mayoría con patologías psiquiátricas. De ellos seis tienen 80 años o más, como José Luis Iglesias Riopedre, y otros siete más de 70 años, todos ellos con patologías de cierta gravedad que les obligan a mantener tratamiento farmacológico diario. Los funcionarios vienen quejándose de las dificultades para tratar con presos que deberían estar en centros psiquiátricos especializados.