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Los recuerdos de mi lápiz

Aquel guaje de Pando

Junquera deja un recuerdo imborrable

Vida de ensueño, tiempo de recuerdo, amores de ilusión y emociones compartidas.

El día 6 de mayo de 2019, muy despacio, a hurtadillas, sin avisar, se nos fue aquel "guaje de Pando": Andrés Avelino Zapico Junquera. Junquera llegó a ser portero del Real Madrid, al que había llegado desde su Cruz Blanca juvenil y su querido equipo del Unión Popular de Langreo. Al día siguiente, 7 de mayo, en una tarde soleada pero de atmósfera pesada, plomiza, llega en su último habitáculo, adornado con los colores de sus equipos, a la iglesia de La Felguera.

Los alrededores estaban abarrotados de amigos y compañeros para despedirle en el último acto, su funeral. La ceremonia, oficiada por los sacerdotes J. Antonio Macho y Fernando Fueyo (este último capellán del Real Sporting de Gijón), con la presencia de sus hijos, familiares, representación del Real Madrid compuesta por Emilio Butragueño y Amancio Amaro, acompañados por Jesús Agustín "Tintín" y componentes de la Peña Madridista y todos los que quisimos despedir a "aquel guaje de Pando", escuchamos en el impresionante templo resonar su nombre, ¡Junquera!, ¡Junquera! Estoy seguro de que a muchos, como a mí, aquel nombre vibró en nuestros corazones como la alineación de un equipo que ya para siempre jugará en la Liga Eterna.

Aquel guaje de Pando que fue el Gigante Bueno del Bernabéu jugó en la calle al fútbol de barrio, llegando a ser futbolista profesional de élite y destacando en el mejor equipo del mundo, el Real Madrid "ye-ye" de los años sesenta.

En su retirada, después de jugar dos años en el Real Zaragoza, volvió a su Langreo natal con toda su sencillez a cuestas y el silencio de su gran humanidad, desplegándola ante todos desde su bar de Sama. La misma humanidad y silencio con los que se fue el día 6 de mayo donde sus más íntimos amigos, Lavandera, el Pibe, Antón Savedra y Tintín, con lágrimas en los ojos, depositaron por última vez los colores de sus equipos.

Aquel "guaje de Pando" de portentoso físico, que fue el "gigante bueno del Real Madrid", lleno de modestia y campechanía estará hoy jugando en los Campos de sueños de la Liga Eterna.

Junquera, tus amigos nunca te olvidaremos.

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