El verano llega a su fin y todo vuelve a empezar. Adiós al bronceado en la playa o en la piscina, sin embargo, gracias a algunos consejos, puedes prolongar tu bronceado. El cuidado de la piel después de las vacaciones es importante, especialmente después de unas largas vacaciones en la playa. Pero no te descuides, es importante restaurar tu piel después del estrés de los rayos del sol.

Es necesario utilizar los productos adecuados, capaces de nutrir e hidratar la piel y, al mismo tiempo, capaces de no apelmazarla, sin dejar de ser ligeros. A este respecto, vamos a revelar un secreto que no mucha gente conoce: la exfoliación o los exfoliantes no eliminan el bronceado, al contrario, ayudan a mantenerlo. Veamos los trucos que hay que tomar para un correcto cuidado de la piel después del verano.

En primer lugar, nunca se debe aplicar un limpiador facial demasiado agresivo. En esta primera fase post-vacacional, la piel está muy frágil y estresada. No debemos hacer más daño, por lo que es preferible utilizar limpiadores faciales de baja espuma porque son menos agresivos.

Es mejor utilizar productos de leche o mousse, que tienen una mejor acción calmante e hidratante que las espumas. La leche limpiadora es muy eficaz para las personas con pieles grasas, o con limpiadores en aceite. Además, es importante desmaquillarse siempre antes de acostarse, sobre todo si la piel está bronceada.

Utilizar el agua micelar y luego continuar con la aplicación de la leche limpiadora. Las texturas ligeras son ideales para mantener la piel fresca e hidratada. El consejo es seguir con las cremas faciales en gel, que son ligeras, al menos hasta que lleguen los primeros fríos. Hidratar la piel todos los días es un buen hábito para mantener el bronceado durante mucho tiempo.

También puedes aplicar un buen tónico, o un sérum con aceites naturales, antes de aplicar la crema. Y de nuevo, el tan temido exfoliante es realmente bueno para el bronceado. Exfoliar la piel después del verano es un hábito saludable porque no afecta al bronceado, sino que sólo elimina la capa superficial de la piel, es decir, las células muertas.

De este modo, la piel conservará el bronceado durante más tiempo y tendrá un aspecto hermoso y radiante. La limpieza debe realizarse una vez a la semana. No se recomienda el peeling químico. Para mantener un buen bronceado, se puede aplicar una mascarilla a base de ingredientes naturales. Hay muchos en el mercado que son apropiados precisamente para una función después del sol.