El Avilés Stadium cuenta con un equipo de diversidad funcional y esta semana ha vuelto a los entrenamientos en el campo de fútbol 7 del Quirinal. Los chavales están encantados con volver a pisar el césped artificial después de más de un año sin jugar. La pandemia cambió sus planes de raíz. Formaron este área del club en los primeros compases de 2020 y a mediados de marzo del pasado  año, todo se paró a cuenta de la crisis sanitaria y su confinamiento domiciliario. Los miembros del equipo lo sufrieron y solo pedían volver a vestirse de corto, con la elástica amarilla como la que entrenaron el pasado jueves.