Demostrando que su relación marcha viento en popa y que tras su reconciliación intentan separarse lo mínimo e imprescindible, Tamara Falcó e Íñigo Onieva han dado un nuevo y esperado paso que todavía no se había producido desde que decidieron jurarse amor eterno en Nochevieja. Y es que la Marquesa de Griñón ha conocido por fin el piso de su prometido.