En el último año, la depuradora del Este ha evitado el vertido al mar Cantábrico de 13,4 millones de metros cúbicos de aguas fecales De media, el agua llega con 200 miligramos por litro de sólidos en suspensión y tras todo el proceso de depuración se vierte al mar con 5 miligramos por litro, la séptima parte del máximo autorizado. La instalación ha depurado 424 litros por segundo en este año, aunque tiene una capacidad para tratar completamente hasta 1.000 litros por segundo, cifra que se eleva hasta los 3.000 litros por segundo en lo que respecta a desarenado y desengrasado.