La candidata del partido Morena (Movimiento de Regeneración Nacional), Claudia Sheinbaum, ha sido elegida presidenta de México convirtiéndose así en la primera mujer en ostentar este cargo. La candidata de la izquierda ha conseguido una victoria histórica. De 61 años, hija de inmigrantes judíos, de formación científica, Claudia Sheinbaum tiene también la experiencia política de haber dirigido el Distrito Federal. Ha prometido un Gobierno “honesto, sin corrupción ni impunidad”. En el Zócalo, una de las plazas más grandes del mundo, no cabía un alma. Sheinbaum sustituye en el cargo a su compañero de partido, José Manuel López Obrador, el anterior presidente, que la ha felicitado efusivamente. En ella no hay rastro de populismo y sí mucho de pragmatismo. Y llega sin deudas. Elegida por el partido primero y luego por uno de los mayores porcentajes de voto en la historia de México, ha dejado KO a la candidata Gálvez, que representaba a los dos grandes partidos de gobierno del país: el PRI y el PAN. La violencia del narco, que se ha multiplicado en los últimos años, será uno de sus grandes desafíos. También una reforma constitucional en la que los jueces serían elegidos directamente por voto popular. Pero que a estas horas depende de los resultados definitivos en el Senado.
