"Las niñas y jóvenes deben confiar en sus posibilidades y perseguir sus sueños; los techos de cristal existen, pero se van diluyendo". Las líderes científicas reunidas en el Club Prensa Asturiana de LA NUEVA ESPAÑA para conmemorar el Día de la Mujer y la Niña en la Ciencia, que se celebra cada 11 de febrero, dejaron claro que la diferenciación entre carreras y profesiones masculinas y femeninas carece de sentido hoy en día.

Mamen Oliván, directora gerente del Serida, aseguró que en su caso no ha tenido que romper un techo de cristal, pero reconoció que cuando empezaba, las cosas eran muy distintas: "Las personas de mi generación nos damos cuenta de que no había directoras de centros ni consejeras. Las mujeres queremos hacerlo todo bien y tener muy activa la vida familiar, es duro, pero posible", indicó la bióloga que capitanea la investigación agraria que se hace desde el Principado.