Veníamos del miedo, de lo desconocido; un virus nuevo, un confinamiento. Echamos a andar 2021 con las ganas de vacuna. Tanto la hemos pronunciado que, según la Fundéu se ha convertido en la palabra del año. No es que la palabra sea nueva, ni mucho menos. En nuestro diccionario lleva desde 1803, pero este año no ha tenido rival. Una palabra que dice mucho, pero en la que también va implícito el hartazgo y el deseo de que el nuevo año venga con buenas palabras.