El cabecilla

La Policía sitúa al ovetense J. M. P. , alias «Piuki», en lo más alto de la trama. Para los investigadores, es el «líder» de la «banda de los surferos» y de él partía todo el negocio.

El hombre de confianza

J. L. L. F., ovetense del barrio de Vallobín, era el hombre de confianza de «Piuki». Según la Policía, era el encargado de hacer las entregas a otros proveedores con peso en la organización.

La rama de Oviedo

Los agentes aseguran que el ovetense J. C. D. F. negociaba directamente con «Piuki» y recibía los encargos de manos de J. L. L. F. A su vez, la Policía asegura que el empresario, con dos cervecerías en la zona de Valentín Masip, suministraba material a D. C., M. G. C (ovetense que practicaba el surf en Salinas) y a J. B. F.

Conexión con la cuenca

A J. R. B. la Policía también lo coloca en la zona alta del organigrama. Según los agentes, él desempeñaba en la cuenca del Nalón el mismo papel que J. C. D. F. en Oviedo. Recibía la droga por parte del hombre de confianza de «Piuki» y a su vez le servía a E. G. M., un distribuidor. Los dos detenidos de Langreo han salido de la cárcel tras pagar una fianza de 10.000 euros.

Ramificaciones

La Policía no ha cerrado la investigación y no descarta nuevas detenciones, ya que la red de distribución es muy amplia.