LA NUEVA ESPAÑA se ha colado en las cocinas de ocho de los locales premiados en el VII Campeonato de Asturias de pinchos y tapas para desentrañar los secretos de pequeños manjares que son todo un despliegue de creatividad.

Un buen ejemplo es el pincho llamado "Del torto asturiano nos gustan hasta los andares", ideado por el chef Rodrigo Roza, de La Taberna del Zurdo, en Oviedo, vencedor y acreedor de la "Montera picona de oro". El pepito de ternera del restaurante ovetense Naguar, regentado por Pedro Martino, segundo clasificado, tiene como mérito encerrar en pan lo más sabroso del bocadillo de carne: la salsa. El "¿Ye manzana?", de Los Llaureles, en Torazo, merecedor del premio al pincho asturiano, es un homenaje a la manzana, a la que no le falta el rabito de pasta brick con una hoja de canónigo. A Pepe Ron, en Cangas del Narcea, la inspiración le llegó viendo una cafetera Nespresso en una escaparate. La mención al pincho más clásico glosa las virtudes del milhojas de manzana de Casa Tataguyo (Avilés). La votación popular, a través de LA NUEVA ESPAÑA, ha premiado el rollín de sabadiego, del café Tenampa; las delicias sobre pisto de mencía y La Peral, de la cafetería Vivaldi, y el rollito de ternera del restaurante El Portalón de Rioja, los tres de Gijón.