Izquierda Abierta, el partido de Gaspar Llamazares, ha impugnado ante la Comisión de Garantías de Izquierda Unida la candidatura europea aprobada hace unos días al considerar que se ha cometido un "fraude de ley" y se han vulnerado los derechos democráticos en la confección de la lista electoral. Llamazares reclama el sexto lugar de la lista, que ocupa la alcaldesa de Castrillón, Ángela Vallina para un candidato de su formación.

Izquierda Abierta, uno de los cinco partidos integrados en IU, argumenta que la ejecutiva de la coalición ha cometido un fraude y ha actuado con "intolerable deslealtad" hacia los militantes en la confección de la candidatura europea por lo que urge a rectificar el "dantesco espectáculo" y la "nefasta" forma de entender la democracia que, a su juicio, ha demostrado en el proceso. La formación dirigida por Llamazares insta a la dirección de IU a evitar "males mayores" que llevarían a la organización a una pérdida de votantes.

El paso dado por el partido de Llamazares no es ninguna sorpresa puesto que ya advirtió de que acudiría a la Comisión de Garantías el pasado 1 de marzo, cuando el Consejo Político ratificó la candidatura europea, que lidera, por tercera vez, Willy Meyer. Izquierda Abierta ya se quejó entonces de que se adjudicasen los puestos 5 y 7 de la lista como "referentes sociales" a la dirigente de CC OO, Paloma López, y a Javier Couso, hermano del cámara de televisión muerto en la guerra de Irak, cuando ambos tienen el carné de IU desde hace tiempo. Esa decisión relegó a los representantes de Izquierda Abierta a posiciones entre los siete primeros lugares de la lista, lo que les impide optar a un escaño considerado de salida para las europeas.