La inspiración le vino en algún lugar del mundo, el año en el que a Carlota Pico le dio por coger su mochila y ponerse a cruzar continentes para reflexionar. Tenía un dilema sencillamente complejo: qué hacer con su vida.
Aquí va la historia de una periodista desengañada reconvertida a exitosa emprendedora, que un día supo ver que había muchas redes sociales que conectaban a personas pero ninguna que conectara a empresas, y que entonces había que hacer algo. Y ese algo es hoy "BeConnections", la primera red social que pone en contacto a empresas de todo el mundo con presencia actual en más de 35 países. Y subiendo.
De su infancia en Washington queda un inglés perfecto, en Madrid están su lugar de nacimiento y de residencia y en Asturias hay un montón de recuerdos y buenos momentos. En Tapia se conocieron sus padres, en Tapia está su vida en verano y las amigas, y la fabada, y "la buena gente" "Es llegar aquí y saber que estás cómoda, sentirte querida", dice por teléfono.
Al principio, Carlota quería ser periodista y para eso hizo periodismo y Relaciones Internacionales en Washington. Cuando acabó pasó por la Sorbona en París y se dedicó a viajar por países emergentes y a escribir en una revista internacional. Se fue a Ghana, Gambia, Sudáfrica, Emiratos Árabes, Catar, Turquía, de África a Oriente Medio, buscando oportunidades de inversión. Estuvo varios años viajando y cuando volvió a España vio la realidad: una crisis económica galopante y una situación dolorosa: como periodista le iba a costar crecer una barbaridad. Y como ella quería vivir en España algo había que hacer. Pero no lo sabía. Entonces se fue a dar la vuelta al mundo para reflexionar, para abrir los ojos. Y los abrió. Ahí empezó todo.
"Me encontré un país deprimido, hundido. Me puse a pensar por qué no le hacíamos frente a esta crisis y creí que hacía falta ayudar a las empresas. Por mi experiencia, sabía que había regiones con potencial y dinero fuera de España interesantes", explica.
Y de esa idea, varios contactos, un poco de suerte, un poco más de riesgo y un mucho de ganas, esfuerzo e ilusión salió su empresa propia, que lo que hace básicamente es conectar a las pymes de todo el mundo y poder encontrar información de ellas por diferentes filtros. Así explica su esencia: "Es como un primer contacto. Mandarse mensajes, hablar de nuevos proyectos, ver fotos", dice. "Hasta entonces, las empresas tenían que gastarse dinero para venir a Europa o salir de ella y buscar alianzas estratégicas. Empecé a preguntar a varios directores generales de multinacionales y pymes si les parecía interesante y lo empecé a poner en marcha".
Así que en 2012 se empezó con la programación y las tareas de seguridad, que duraron más de la cuenta. Y al principio de este año que termina se dio a conocer al público en general. De momento, la cosa le va bien a Carlota y a su socia, que se financian con inversores privados. Ha conectado a varias decenas de empresas en 35 países del mundo de los cinco continentes y ha ganado un prestigioso premio en el Summit 2014, la mayor feria europea de internet que se celebra cada año en Dublín donde estuvieron en la última edición más de 15.000 empresas.
¿Y el futuro? "Me encantaría que se estableciera como un punto de referencia para que las empresas se pudieran internacionalizar de manera gratuita e instantánea", dice Carlota. "BeConnections también ayuda a romper los prejuicios, a cambiar el chip", añade. Como ella, que iba para periodista y acabó convertida en una emprendedora de éxito.
