Llenar de cultivos las riberas de los ríos es una de las "prioridades" de la Consejería de Desarrollo Rural y Recursos Naturales para la presente legislatura. Fuentes del Principado explican a LA NUEVA ESPAÑA que el nuevo Programa de Desarrollo Rural (PDR) articula medidas para fomentar la agricultura asturiana y en concreto, las nuevas plantaciones (kiwi y arándanos). El Gobierno autonómico se apoya en la estrategia de competitividad del sector primario y del medio rural, elaborada por investigadores de la Universidad de Oviedo, puesto que identifica a la agricultura "como una actividad con capacidad de crecimiento en la región". En este sentido, los responsables de la Consejería destacan que ya existen experiencias en el Bajo Nalón, "donde la iniciativa privada ha ido de la mano del apoyo público a través de los programas de desarrollo local financiados con los fondos Leader". "Y son estas experiencias las que estamos intentando trasladar a otras zonas con potencial agrícola", agregan.
La Administración regional hace hincapié en la política de ordenación del territorio, desarrollada durante los últimos treinta años en Asturias, ya que a su juicio ha permitido que los terrenos "hayan mantenido de forma importante su vocación agrícola". "En estos momentos, en los que hay emprendedores decididos a involucrarse en estos proyectos, desde la Consejería se colabora también para que, a través del Banco de Tierras puedan movilizarse de forma adecuada los suelos", dicen. La consejería de Desarrollo Rural matiza que su función es la de promocionar, pero para ello necesitan contar con el apoyo de los propietarios.
