Además de indicios de comisión de delitos, el sumario del "caso Pokémon" tropieza de vez en cuando con opiniones a calzón quitado y teléfono abierto sobre el engranaje interno del PP de Asturias. De paseo por las transcripciones de las conversaciones grabadas por los funcionarios del servicio de Vigilancia Aduanera es posible descubrir al presunto "abrelatas" de la "trama del agua", Joaquín Fernández, tendiendo redes dentro del partido. Cuando sondea a Carmen Rodríguez Maniega, diputada en el Congreso y vicesecretaria de Política Municipal del PP regional, en una conversación telefónica interceptada en diciembre de 2012, él trata de obtener información preguntando por el entonces secretario general y ahora senador Fernando Goñi. "¿Y Goñi, qué? Pinta cero patatero, ¿no?", cuestiona Fernández. "Goñi vive en su propio mundo, él piensa que pinta mucho", contesta ella tras una larga duda.
En otro momento de la extensa charla, siete páginas de transcripciones y de saltos de un tema a otro, Rodríguez Maniega traza un apresurado perfil de los comportamientos del diputado autonómico Matías Rodríguez Feito. "Sí, sí, Matías está colocadísimo, pero es que Matías es muy listo, porque Matías invirtió en el negocio, un día un chosco, otro día una pulsera, otro día te pago una comida, otro día te trae unas peladillas y el otro día unos piñones, pero... Hay gente que es generosa con todo el mundo, pero hay otros que solamente son generosos con María Dolores de Cospedal, con Cherines. (...) Pero cuando solamente... a los jefes, entonces es que ya no eres generoso".
