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PILAR LÓPEZ DÍEZ | Doctora en Ciencias de la Información, experta en violencia machista, género, comunicación y políticas de igualdad

"Lo anómalo es que sólo una de cada tres listas esté encabezada en España por una mujer"

"El profesorado debe fomentar, en todos los niveles educativos, el respeto hacia la mujer; ésa es una muy buena inversión"

Pilar López Díez.

Oviedo, C. JIMÉNEZ

Pilar López Díez ha impartido numerosos cursos para fomentar la perspectiva de género en medios de comunicación e instituciones. Licenciada en Periodismo, ejerció la profesión en diversas cadenas de radio. En la actualidad pertenece al Centro de Estudios de la Mujer de la Universidad de Salamanca.

-¿Qué le parece la presencia mayoritaria, como ocurre en Asturias, de mujeres liderando las candidaturas al Congreso?

-Me alegro mucho. Es una muestra de que caminamos hacia la igualdad, por lo que tenemos que felicitarnos. La normalidad será que en unas provincias habrá más mujeres liderando las listas y en otras, más hombres. Lo anómalo es que, todavía, a nivel nacional, sólo una de cada tres listas esté encabezada por una mujer. En los partidos políticos no hay igualdad.

-¿Las mujeres tienen el peso adecuado en política?

-En su justa medida, no. En los partidos políticos siguen mandando, mayoritariamente, los hombres que tienen el poder, y no siempre por méritos; las cooptaciones de amigos entre amigos, pagando y debiendo favores, siguen existiendo. Las feministas lograron introducir en la ley de Igualdad la obligación del 60%-40%. Aunque no paritario, este sistema de cuotas trajo, por lo menos, que haya más diputadas en el Congreso español que en el Parlamento británico. El sistema de cuotas, como se reconoce internacionalmente, ha dado muy buenos resultados porque las mujeres con cabezas bien amuebladas sabíamos que era mentira que no tuviéramos méritos para ocupar cualquier puesto de responsabilidad y poder.

-¿Qué opina de las listas cremallera?

-Estoy totalmente de acuerdo con las listas cremallera: 50%-50% de mujeres y hombres y, además, en puestos alternos. Es de justicia que se establezcan, por ley, para todos los partidos políticos. El 60-40% que se introdujo por ley en 2007 ha significado que algunos partidos abusen de poner en los primeros puestos mayoritariamente a hombres y dejen a las mujeres en los cuartos y quintos lugares, lo que ha dado como consecuencia que haya menos de un 36% de diputadas, hoy, en el Congreso.

-¿Qué estereotipos cree que se repiten más cuando las mujeres saltan a la esfera pública?

-El estereotipo más difícil de erradicar, la mujer como objeto, es el más utilizado. Se ha visto en las informaciones y comentarios del debate electoral del pasado 7-D; aunque he comprobado que han querido ser políticamente correctos con Sáenz de Santamaría, sí que han dejado caer algunos estereotipos sobre el aspecto físico. Sobre características de la personalidad, a un escritor se le deslizó el adjetivo "codiciosa", que tampoco venía a cuento. Y, para seguir con el debate del 7-D, el propio canal señalaba que la Vicepresidenta se había emocionado cuando hablaba de violencia de género. Es el problema del estereotipo, que es tan poderoso que vemos emociones donde creemos que debe haberlas.

-¿El caso de Sáenz de Santamaría en el debate del pasado lunes evidencia el escaso peso de las mujeres?

-Sí, el poder político está en manos de hombres; ellos tienden a rodearse y elegir a sus amigos, con los que se encuentran a gusto, discuten y en los que confían. Habría sido un debate de cuatro hombres cabezas de lista si Rajoy se hubiese atrevido; como no fue así, Sáenz de Santamaría tenía que estar ahí, como estuvo en tantas ocasiones, sacando al Presidente las castañas del fuego.

-¿Qué políticas se deben adoptar para superar los estereotipos de género?

-Los estereotipos están tan presentes en la sociedad y son tan difíciles de erradicar cuando somos mayores que sólo desde la escuela infantil se pueden corregir esas ideas preconcebidas sobre las mujeres y los hombres. Ideas tan erróneas como que la ambición está bien en los hombres y mal en las mujeres; que las mujeres, como son más sensibles, deben dedicarse a cuidar a la familia mientras ellos se dedican a la política o a los negocios... El Consejo de Europa dice que hay que incluir en los programas de estudios oficiales, y a todos los niveles de enseñanza, material didáctico sobre igualdad, el respeto mutuo, la solución no violenta de conflictos, la violencia contra las mujeres por razones de género y el derecho a la integridad personal, adaptado a la fase de desarrollo del alumnado. Siempre digo que si desde la educación y desde los medios de comunicación, incluyendo internet, se promovieran ideas de igualdad y respeto hacia las mujeres, progresivamente se irían superando los estereotipos y, así, la violencia machista.

-¿Qué se ha hecho bien y qué mal en esta cuestión?

-Primero vamos a señalar lo que en España se ha venido haciendo bien y en otros países similares no se ha llegado, casi, ni siquiera a considerar hacer. En nuestro país se habla de la violencia machista contra las mujeres desde hace casi veinte años; la ciudadanía está informada de este problema gracias a los medios de comunicación, y eso hay que agradecerlo. Otra cosa es que haya que mejorar; las redacciones de los medios deberían ponerse ya a elaborar sus propios códigos autorregulatorios que las obligara a seguir las normas básicas, como evitar victimizar más a las mujeres o justificar las actuaciones criminales. Los medios deben promover la formación en igualdad de sus periodistas. A mayor formación, mayor calidad. Lograr informar con respeto hacia las mujeres (o elaborar publicidad que no las minusvalore o desprecie) supone ganar audiencia, porque en nuestro país ya no vale todo, hemos conseguido que la sociedad española ya no jalee el machismo y que se haya devaluado socialmente.

-¿Qué causas subyacen en la violencia machista?

-La violencia de género, como dicen la ONU y muchos convenios que ha firmado España, tiene sus raíces en los estereotipos de género. Los hombres que maltratan y llegan a matar a las mujeres lo hacen porque se creen superiores a ellas y las quieren mantener bajo control y subordinadas a ellos. Los estereotipos que se transmiten a través de la familia, la escuela o los medios de comunicación y la publicidad, que fomentan la idea de que los hombres son más agresivos, más distantes y decididos o tienen menos capacidad de control, mientras que fortalecen los estereotipos femeninos de pasividad, comprensión, sumisión a los demás, etcétera, están alimentando la violencia de género.

-¿Ha aumentado la vulnerabilidad de las mujeres?

-Creo que hay muchos tipos de mujeres. Algunas nunca han querido ni se han sentido vulnerables y lo han conseguido; son las más informadas y con capacidad de decidir sobre su vida, y no son pocas. Además, el feminismo ha venido haciendo una gran labor y muchas mujeres jóvenes ya no se están dejando manipular; hasta la vicepresidenta del Gobierno arengó a las jóvenes a no dejarse controlar a través de los móviles por sus novios cuando habló sobre violencia de género. Pero no sólo las jóvenes; muchas de las mujeres que los criminales están matando mueren porque se han rebelado. Las mujeres que más se han creído estereotipos como "yo no soy nadie -o nada, como decía la canción de Amaral, tan patriarcal y desmovilizadora-, el estado perfecto para una mujer es estar casada, las mujeres para ser felices tienen que tener hijos..." son las más vulnerables.

-¿Qué opina del modelo "50 sombras de Grey"?

-Escribir mil y pico páginas de ideología machista ha hecho a la autora de "50 sombras de Grey" multimillonaria. Literariamente hablando, hasta ella ha verbalizado la escasa calidad de sus libros, pero lo que sí ha hecho es un flaco favor a las niñas y jóvenes, animándolas, confundiéndolas y ofreciéndolas a los machistas para que puedan someterlas más fácilmente.

-Ciudadanos y Podemos plantean "legalizar" la prostitución, ¿qué opina?

-Estoy absolutamente en contra de los prostituidores que someten y humillan a las mujeres prostituidas porque disponen de dinero para obligarlas a hacer lo que sus parejas nunca les consentirían. Si un partido pretende legalizar la compra del cuerpo de las mujeres, nunca tendrá mi voto.

-¿Son apropiadas las políticas públicas para superar este problema?

-No. Hay que empezar a formar de manera sistemática y seria al profesorado de todos los niveles educativos para que inculquen el respeto a las mujeres; ésta sí es una muy necesaria inversión. También los medios de comunicación y la publicidad pueden hacer una gran labor a favor de la igualdad, por ejemplo, evitando que el 60 por ciento de los anuncios en la Unión Europea representen a las mujeres realizando tareas domésticas o cuidando de las niñas y niños. No nos extrañemos después cuando las encuestas dicen que uno de cada cuatro chicos piensa que es preferible que una mujer se quede en casa y no salga a trabajar cuando es madre.

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