Además de los 70 diseños que componen la muestra, Barbie viste en Asturias una pieza singular, obra de la asturiana Virginia Abzueta.
La singularidad de estas piezas ha generado gran expectación en cada plaza en la que se han expuesto, y también alguna curiosa anécdota. Una de las más emotivas para Antonio Azcona se produjo en Sevilla, cuando presentó la muñeza inspirada en Cayetana Fitz-James Stuart, con un modelo de Tony Benítez.
"El vestido está realizado con la misma tela que Benítez usó para hacer el vestido de la duquesa para la boda de Felipe y Letizia. Cuando presentamos la exposición en Sevilla y lo comenté, Carmen Tello, que estaba allí, se emocionó mucho al ver la muñeca de la que había sido su amiga, que había fallecido unos meses antes", explica el comisario de la muestra.
Entre las distintas partes de la exposición, Azcona valora especialmente la dedicada a recorrer la historia de la moda, ya que aprecia el valor didáctico que tiene para el visitante y la vertiente reivindicativa sobre la importancia que, históricamente, ha tenido la moda. Una muestra que emociona también a todas las mujeres que, siendo niñas, reflejaban en su Barbie los deseos para su vida futura y la vestían con su propios diseños hechos de retales.
