La recuperación del proyecto de la incineradora de Serín no solo serviría para que ardan buena parte de los residuos de Asturias, sino que también "quemaría" el pacto de investidura alcanzado entre la FSA e IU para aupar al socialista Javier Fernández como presidente autonómico en julio de 2015. Esta fue la advertencia que lanzó ayer el portavoz de la coalición, Ovidio Zapico, después de que el Consejo de Gobierno del Principado aprobara un nuevo plan de residuos en el que, en cumplimiento de ese acuerdo de investidura, se retrasa hasta 2017 la decisión final sobre la incineradora, que se tomará a partir de unas alternativas que se analizarán en un plazo de tres meses y dentro del periodo de revisión de la nueva estrategia de residuos.

IU no está dispuesta a consentir incumplimientos ni retrasos en un asunto que considera fundamental. Por ello, Zapico reclama a la Consejería de Infraestructuras "celeridad" en el análisis de las alternativas a la incineradora. Y, a este respecto, también alerta de que su formación no va a tolerar que se incumplan los plazos establecidos para los estudios o que las decisiones se vayan postergando. Ello, reiteró, vulneraría el acuerdo que permitió la investidura de Fernández.

La incineradora fue la opción elegida por el Gobierno socialista para solucionar la "fracción resto", que es la parte de los residuos domésticos que se obtiene tras las recogidas separadas. Sin embargo, en cumplimiento del pacto de investidura, el Ejecutivo autonómico dio marcha atrás y aceptó el estudio de otras alternativas a esa planta. Según indicó Belén Fernández tras la reunión del Consejo de Gobierno del pasado miércoles, tal análisis ocupará un periodo de tres meses. La incineradora sigue "en suspenso", subrayó la titular de Medio Ambiente.

El plan regional de residuos fue tumbado en primera instancia por los tribunales de justicia, debido a carencias en su tramitación. Una vez subsanados esos errores, la Dirección General de Calidad Ambiental del Principado sacó a información pública en septiembre de 2015 la nueva propuesta, que iba acompañada de una memoria en la que se especifican los cambios sobre el texto original. Según la información facilitada por el Principado, en el proceso se recibieron 16 alegaciones y fue la estimación de varias de ellas lo que conllevó una ligera modificación del proyecto.

El documento aprobado esta semana por el Consejo de Gobierno retrasa la decisión sobre la incineradora, a la espera de alternativas que sean técnicamente viables y respetuosas con el medio ambiente, pero sí permitirá iniciar de inmediato, a lo largo de este verano, la ampliación del vertedero que el consorcio para la gestión de los residuos (Cogersa) tiene en Serín, que está prácticamente lleno.

La ampliación del vertedero tiene un presupuesto de 2,5 millones y consiste en un recrecido en altura del depósito que, en una primera fase, alcanzará los 2,8 millones de metros cúbicos y permitirá cubrir las necesidades de Asturias para los próximos tres años. Además, según Belén Fernández, el Ejecutivo tiene previsto que en el mes de mayo esté adjudicada la nueva planta de lodos, cuyo coste estimado es de 3,3 millones de euros.