Luis Carlos Iglesias García de Vicuña siempre trabajaba detrás de una gran montaña de libros y papeles. Pese a ese desorden, al ex director general de Urbanismo "nunca se le escapaba una", según relata su jefe en aquella etapa, Guillermo Morales. "Lo tenía todo: era leal, generoso, afable y le gustaba el trabajo en equipo". Iglesias falleció el lunes a los 65 años de edad en Madrid dejando en el recuerdo de sus compañeros "una gran personalidad y capacidad profesional". Hasta el punto que el exconsejero de Ordenación del Territorio y Vivienda, Arturo Gutiérrez de Terán le describe como "el mejor abogado de urbanismo de Asturias".

Precisamente Gutiérrez de Terán fue la persona que en 1982 lo "fichó" para el Gobierno regional. Entonces, Luis Carlos Iglesias trabajaba en Barcelona. "Todo fue muy rápido. Yo le propuse volver a Asturias y él aceptó. No había un experto tan bueno en legislación urbanística como él", asegura el exconsejero, muy emocionado. "Los amigos lo llamábamos el 'abotector' (mezcla de abogado y arquitecto) por su gran formación urbanística", agrega tras asistir a su despedida en la capilla del tanatorio de El Salvador en Oviedo. La otra versión del apodo que constata su dominio de ambas disciplinas la ofrece la presidenta del Colegio de Arquitectos, Sonia Puente: el "arquigado".

El exconsejero de Vivienda y director jurídico de Telecable, Juan Manuel Cofiño González, también alaba su capacidad de trabajo: "Era uno de los mejores expertos en urbanismo". En los mismo términos se refiere a él Guillermo Morales, ex director general de Urbanismo. "Es imposible que haya otra persona como él. Cuando tenía que dar una noticia mala a los ayuntamientos siempre los acababa convenciendo. Así cuando dejó la Consejería, todo el mundo se lo rifaba. Atesoraba un conocimiento único", asegura. En las distancias cortas, Iglesias destacaba por su honradez y "un carácter crítico resultado de un proceso de análisis". Según Gutiérrez de Terán, era "muy generoso y cariñoso, aunque a veces no lo sabía expresar". Su último acto público fue en abril en una reunión sobre la ordenación del área central.

Luis Carlos Iglesias estaba casado con Felicidad Pirla, tenía una hija, Deli Iglesias, y un nieto, Álvaro Olivella, además de tres hermanos: José Antonio, Sara María y Carmen.