Estrecha, con desnivel, curvas al final de largas rectas y con coches circulando a alta velocidad. Así dicen que es la carretera regional AS-16, entre Pravia y Soto del Barco, los que la transitan a diario. Sin embargo, los vecinos de la zona aseguran que no es una vía peligrosa que registre muchos siniestros más allá de los choques con jabalíes, que se han incrementado en los últimos meses.

"La carretera tiene mucho tráfico pero no tiene mayor peligro, hubo algún percance con ciclistas pero no hay choques como el de ayer (por el domingo)", señaló Casimiro Iglesias, vecino de Peñaullán (Pravia). Es ésta una tesis que también respalda Carmen Teresa Ríos, propietaria de un restaurante a pie de carretera: "Chocar dos coches así de frente es raro, lo que hay sobre todo son golpes por culpa de los jabalíes".

Sin embargo, los conductores que la transitan a diario, como transportistas y camioneros, califican la vía de peligrosa. "Necesita una reparación a fondo para mejorar el firme y ensancharla, porque es algo estrecha; además, algunos coches adelantan al límite y hay peligro por los desniveles, si te descuidas...", comenta el camionero Dionisio Fernández.

La carretera registra una media de 3.500 vehículos al día, con una gran presencia de camiones de carbón o sílices del Suroccidente, y que incluye varias travesías urbanas limitadas a 50 kilómetros por horas y dos tramos de concentración de accidentes.

También los transportistas de fruta, Benito Sierra y Avelino Rodríguez, consideran que la carretera es peligrosa. "El problema es que es mala, tiene mucho tráfico y los coches van a toda velocidad", precisó Rodríguez.

Sierra animó al Principado a arreglar la vía "para venir a por los kiwis tranquilamente". De hecho, el Principado valoró la posibilidad de construir una autovía para mejorar la seguridad del trayecto entre Pravia y Soto del Barco, aunque el proyecto está estancado ante las quejas de los productores de kiwi de Pravia, por donde pasarían los viales de la nueva conexión.

Por su parte, José Manuel Coalla, señaló que el principal problema es la velocidad a la que circulan los conductores: "Pasan muy rápido y no respetan las señales, a 50 kilómetros por hora no pasa ni uno por Peñaullán, se envalentonan y adelantan y cuando salen al carril ya no tienen visibilidad y viene la curva", precisó el vecino. Camioneros, transportistas y vecinos estiman necesaria una reparación que evite nuevos accidentes.