El aullido de la sirena de la rula de San Juan de la Arena advirtió la tarde de la Nochebuena de la inminente llegada de L'Anguleru, al que esperaban unas quinientas personas, más de 200 menores, en el muelle pesquero. Por noveno año consecutivo, este personaje navideño repartió revoltijo entre los más pequeños que le aclamaban al grito de "¡Anguleru, Anguleru!" . A bordo de la lancha angulera del patrón mayor de la cofradía arenesca, Eloy Sopeña, L'Anguleru saludó a los presentes. Su fama se extiende: casi 1.300 niños han participado en su concurso de dibujos y algunos trabajos llegaron de fuera de la región. Ya en la Rula y sentado en su "trono", presidiendo la cancha de subastas, L'Anguleru conoció los deseos de niños y mayores. Algunos de los pequeños acudieron vestidos con chubasqueros amarillos y llevaron faroles y linternas para guiarle.

Tras el encuentro con los asistentes, L'Anguleru se dirigió a su lancha mágica, L'Angulina, que este año incorporó una vela. Según los organizadores del acto, la asociación Garabuxada, "el gran número de peticiones de regalos efectuadas por rapacinos de toda Asturias hizo que L'Anguleru deba viajar en la noche de Navidad más rápido para llegar a tiempo a todos los rincones del Principado". Tras la Nochebuena, los pequeños comprobaron con regalos la magia del personaje que ya se ha consolidado en la Navidad de La Arena.