Se les conoce como los NOx y son cancerígenos. Los tenemos a montones en nuestra vida urbanita y son doblemente peligrosos porque no se ven. El 80% de los NOx que sufrimos provienen de los motores de los coches. Es el óxido de nitrógeno que tiene poco que ver con el humo negro que sale de los tubos de escape. Ese, también peligroso, lo es menos porque es facilmente identificable.

Profesionales de distintos países de Europa tuvieron ayer una cita en Asturias y sobre el terreno técnico: en la ITV de Siero. Son miembros del Comité Internacional de Inspección de Vehículos a Motor (CITA por sus siglas en inglés) y vinieron a comprobar distintas técnicas de detección del óxido de nitrógeno, sobre todo allí donde es más difícil: los motores diesel. Los diesel generan más NOx que la gasolina.

La presencia del comité internacional en Asturias responde a dos causas. La primera es que la ITV de Siero-Principado pasa por ser "la más moderna del mundo". Su director, Pablo Guimarey, lo afirma sin falsas vanidades. "Escierto, por esta estación pasan técnicos de Europa e Hispanoamérica a ver cómo se trabaja. Y por supuesto de toda España".

La segunda razón es que ITVASA, la empresa pública del Principado que gestiona las ITV de la comunidad, realizó un estudio de 348 pruebas de este tipo de emisiones, uno de los mayores llevados a cabo hasta la fecha en la Unión Europea.

Los óxidos de nitrógeno son los principales causantes de que las grandes ciudades cierren el tráfico o limiten las velocidades. En ocasiones esas medidas no responden exactamente a presencias de "nubes" de contaminación, lo que desorienta a los ciudadanos. Pero la contaminación "invisible" está ahí.

Un dato del Ministerio de Industria, que recordaba ayer en la sesión de trabajo el director técnico de ITVASA, Celestino Pérez: Si se controlara eficazmente al cinco por ciento de vehículos más contaminantes se mejoraría la calidad del aire que respiramos en las ciudades en un 80%.

Merece la pena el esfuerzo de la UE, que deberá elegir entre todos los propuestos un método único y homologado para detectar de forma sistemática las emisiones de NOx durante las inspecciones de ITV. Los óxidos de nitrógeno son las sustancias que están detrás de los escándalos y trampas de algunos grandes fabricantes de coches para solapar su poder contaminante.

A nivel individual es posible, además, bloquear algunos elementos técnicos de protección medioambiental en los coches. La más manipulada es la llamada EGR, válvula que redirige los gases de escape de nuevo al proceso de combustión.