Nick Forstmann, un multimillonario estadounidense que lo tenía todo, cambió la vida de María Franco y Carolina Barrantes. No por una cuestión material, sino por lo que les enseñó a través de su diario titulado "What Really Matters", traducido como "Lo que de verdad importa". Ambas decidieron trasladar esas enseñanzas a la juventud y constituyeron la Fundación "Lo que de verdad importa", que el próximo 9 de noviembre organizará por primera vez en Oviedo, patrocinado por LA NUEVA ESPAÑA, uno de sus multitudinarios congresos en Asturias. Carolina Barrantes explica el objetivo final de esa fundación y los preparativos para la actividad que se celebrará en el Palacio de Exposiciones y Congresos, en el Calatrava, de Oviedo.
- ¿Por qué les impresionó tanto el diario de Forstmann?
-La historia es muy sencilla. Hace diez años María y yo trabajábamos ayudando a fundaciones y ONG's buscando patrocinadores para sus actividades. Un día, María llegó con el diario de este norteamericano multimillonario al que un día le diagnosticaron un cáncer terminal. El hombre decidió entonces dedicar los últimos meses de su vida a escribir un diario en el que transmitir a sus hijos todos aquellos valores que le hubiera gustado enseñarles en vida y que no podría hacer. Fue muy impactante para nosotras, y decidimos poner en marcha un proyecto que nos permitiera trasladárselo a todos los jóvenes. Así empezamos.
- ¿Les costó encontrar patrocinadores?
-Cuando íbamos a las empresas y explicábamos el proyecto nos decían que perdíamos el tiempo, que los jóvenes no tenían valores. No es cierto. Tenemos una juventud luchadora, tolerante, trabajadora, solidaria... Nos da mil vueltas. Pero a lo mejor es que los jóvenes tienen tanto estímulos externos, están inmersos en un día a día de tal locura y estrés, que lo que les falta es tiempo para reflexionar, para pensar en eso que de verdad importa. Diez años después, el proyecto es un éxito donde vamos.
- ¿Qué es lo que de verdad importa?
-Pues pararnos a reflexionar y darnos tiempos para pensar y sentir qué es de verdad importante: las cosas materiales o aquellas pequeñas cosas que nos llenan de verdad y le dan sentido a la vida, como que la familia esté ahí y te apoye, tener amigos, ser honestos, perseverantes, solidarios...
- ¿Y cómo le transmiten esto a los jóvenes?
-Celebramos congresos en los que los ponentes son personas que han vivido distintas experiencias, las relatan y comparten sus sentimientos, sus reflexiones. En definitiva, les hacen pensar sobre determinadas situaciones y les muestran otras formas de afrontar momentos de dificultades.
- ¿Cuál ha sido la historia más impactante que ha escuchado?
-¡Uf! No me pregunte eso. Siempre ofrecemos tres ponentes con tres historias muy personales y distintas, y cada una de ellas te impacta de manera distinta, dependiendo del momento y del estado de ánimo en el que se encuentre el que le escucha. Si tienes o has tenido un problema concreto, te sientes más identificado con el que relata la historia que más se acerca a tu situación personal.
- ¿Cómo van los preparativos para el congreso que se celebrará en Oviedo?
-Estamos muy ilusionadas y muy nerviosas. El auditorio donde lo vamos a celebrar es el mayor de todos los que hemos ocupado en España, y vamos a nueve ciudades distintas de todo el país todo el año, además de a otros seis países. Ya llevamos unas 1.000 inscripciones y esperamos alcanzar las 1.500. Es un reto.
- ¿Qué les trae a Asturias?
-Ana Pardo, de la Fundación 16 de 24, nos descubrió en Madrid y se puso en contacto con nosotras, convenciéndonos de que nos tenían que conocer los jóvenes de Asturias. Y la verdad es que todo el mundo se volcó con el proyecto. Estamos en contacto con la Universidad, colegios, centros de Formación Profesional... Todo el mundo entiende que no vale sólo con una formación académica estupenda para ser un gran profesional, sino que además debemos de formar a las personas en valores. Y mire, nuestra app, que es en la que se pueden inscribir, está funcionando de maravilla. Estamos muy satisfechas y muy ilusionadas.
