Oviedo, Raquel L. MURIAS

Espaguetis y fritanga. Este fue el menú que cenaron los policías del barco Rhapsody, parte de ellos asturianos. desplazados a Cataluña para asegurar el orden y la ley.

Nada que ver con el menú que se exponía a la entrada del restaurante del buque, que intentó a base de parafernalia y nombres rimbombantes esconder lo que de verdad se serviría en los platos. Así, en la carta se anunciaba una cena navideña que parecía contar hasta con ciertas exquisiteces. De primero, hojaldres mixtos napolitanos y ensalada mixta, para pasar luego a un segundo compuesto por una pasta con marisco y bacalao frito y asado de ternera con salsa de setas. De postre, según la carta del restaurante, había frutas y dulces navideños. Pero lo cierto es que nada tuvo que ver lo que tanto los policías como sus familiares desplazados para hacerles una visita en estas fechas tan especiales se encontraron en el plato. Basta ver la foto de la pasta para darse cuenta de que el marisco se cambió por unos mejillones y perejil picado, y que los fritos parecían llevar varios días guardados en el horno del buque esperando a que alguien se los comiese.Poco tuvo que ver esta cena con la que le han servido a Oriol Junqueras dentro del centro penitenciario de Estremera. Junqueras cenó en Nochebuena un consomé, merluza en salsa, flan de huevo y un surtido de dulces navideños. Ayer, día de Navidad en la cárcel también hubo menú especial a la hora de la comida; ensalada de Navidad, entrecot con patatas fritas y profiteroles con nata. Cenó mucho mejor Junqueras que los policías, y eso que éstos fueron trasladados desde el buque Piolín al Rhapsody porque, supuestamente, contaba con alojamientos de mayor calidad y mejores servicios.