"Una cosa son las posiciones y otra, las decisiones". El presiente del Principado, Javier Fernández, respondió de este modo a la pregunta reiterada de los grupos de la oposición en la Junta sobre las contradicciones que detectan entre las posturas exteriorizadas hasta ahora por la nueva ministra de Transición Ecológica, Teresa Ribera, y las del Gobierno regional respecto al ritmo que ha de llevar la llamada "descarbonización" de la economía. Confía el jefe del Ejecutivo en un cambio. Porque "las cosas pueden cambiar", dijo a preguntas de Foro, y conocidas las opiniones de Teresa Ribera, "lo que vamos a ver ahora es la posición de un Gobierno".

Fernández ha reiterado la firmeza de sus convicciones en este terreno, ha ofrecido al nuevo Ejecutivo "toda la cooperación y lealtad institucional" y ha adelantado una exigencia de "reciprocidad". La sesión parlamentaria de preguntas al presidente ha quedado monopolizada por el sondeo de la reacción del jefe del Ejecutivo al diseño del gabinete de Pedro Sánchez y al vaticinio de sus posibles respuestas a los grandes desafíos pendientes de Asturias. Repitió que la energética es "política de Estado" para protegerse de las posibles reticencias que pueda generar el nombramiento de Ribera, coordinadora del grupo de expertos del PSOE que planteó el fin de todas las centrales térmicas del carbón como máximo en 2025, y sin citarlo expresamente anunció que su postura seguirá donde estaba, en la firme oposición a ese cierre que el Principado considera precipitado.

A preguntas de la presidenta del PP, Mercedes Fernández, el Presidente desligó los apoyos independentistas con los que ha contado Sánchez de "ningún pacto" por debajo de la mesa y al llegar al otro asunto espinoso del futuro ha incluido entre los debertes del nuevo Gobierno socialista la tarea de "encauzar" la reforma del modelo. Sabe que el gabinete nace con un punto declarado de "provisionalidad" y duda de que pueda cerrar el asunto, pero sí anunció, a la pregunta del portavoz de IU, Gaspar LLamazares, que pedirá una reunión del Consejo de Política Fiscal y Financiera con el propósito de conocer, ahora sí, la postura del Gobierno en este asunto en el que advirtió que tampoco modificará los postulados que ha defendido hasta ahora.