S. FERNÁNDEZ

El Principado, a través de la Comisión de Urbanismo (Cuota), aprobó ayer, después de más de un año de tramitación, el plan urbano que convierte el concejo de Illas en una reserva natural, dada su apuesta decidida por el suelo rural.

Alberto Tirador, alcalde de Illas, mostró ayer su satisfacción por la aprobación definitiva de las normas urbanísticas más importantes del mandato, aquellas que definen los futuros desarrollos del concejo.

Los representantes locales de todos los partidos determinaron un proyecto singular para Illas: ni un metro cuadrado de la superficie del concejo podía ser de suelo urbanizable. «Queríamos que los pueblos continuasen siendo pueblos; sin renunciar, por supuesto, a los servicios públicos», explicó Tirador. El proyecto fue aprobado de manera provisional por el Pleno del Ayuntamiento.

Para que el plan urbano fuera aprobado de forma definitiva era preciso el acuerdo de los representantes de la Cuota, extremo que se logró ayer por la mañana.

«Defendemos un urbanismo no como moneda de cambio, no como una fuente de ingresos municipales», señaló Tirador.

El concejo de Illas, con el suelo no urbanizable, no es incompatible con el progreso del concejo. A juicio de Tirador, lo que se consigue con esta medida es «una seguridad medioambiental en la zona central de Asturias». El Alcalde, además, piensa que la apuesta verde «desarrolla un papel principal en la comarca: Illas es la zona rural». Con el nuevo Plan General, Illas es, finalmente, «un concejo intocable».